Por Karolina Alonso
La mordedura de la manzana por parte de Adán conllevó a ser del hombre un ser imperfecto y pecador. Aún cuando la devoción a Dios tiene como ideal el amor como rector de todo, ella misma es también una obra imperfecta del hombre. Y es q la religión ha sido utilizada por no pocos como un negocio. Desde los años en que sólo existía el catolicismo se lucraba con la Palabra, de hecho, el surgimiento del protestantismo parte de toda esa corrupción que se gestaba en la antigua Iglesia Católica.
Valerio Ganen Mendoza, impulsor del Movimiento Apostólico Fuego y Dinámica en Contramaestre, es uno de esos hombres que, en la actualidad, pone al servicio de su bolsillo esa necesidad espiritual del ser humano. Este señor ha pedido hasta dinero prestado a sus seguidores y vecinos, todo ello ha devenido en innumerables deudas.
La práctica religiosa con fines de lucro es una debilidad que bien han aprovechado las diversas administraciones norteamericanas. Varias manifestaciones religiosas cubanas han sido atacadas por los encargados de subvertir nuestro sistema social, orientando su prédica con objetivos concretos y recibiendo para ello parte de ese financiamiento que, cada año, el presidente destina a la subversión política hacia Cuba.
Pero a Valerio no le alcanza con el financiamiento, tampoco con la ayuda, el diezmo y las ofrendas que le exige a su feligresía para beneficio personal. Mientras en la Biblia se nos enseña a no utilizar el nombre de Dios en vano y a entender q Dios es amor, Valerio está lucrando con su espíritu y su palabra. Eso es lo único que encuentra el imperio en Cuba para poder servirse, los cubanos de principios, los verdaderos seguidores de Dios no caen en estos juegos
Avra kahdabra 